En Abril todo es diferente.
La lluvia, que húmeda se derrama sobre el asfalto me huele a recordarte.
Llegar a mi casa sin ti es un desastre.
Los bancos vacíos me dicen que un día estuvimos ahí , aunque la lluvia haya desgastado ya nuestras huellas, que absorbidas por las gotas se habrán deslizado por las alcantarillas y derramándose en el mar, perdiéndose.
El campo también lleva tu esencia, no por nada en especial,
sino porque me recuerda a tu libertad exenta de compromisos y plagiada de preferencias,
llenando tu tiempo de hechos imprevistos ,
que, aunque sin ninguna maldad, dejaste vacío el ámbito emocional,
promoviendo encuentros y el conocimiento de otros cuerpos que no somos tú y yo.
Así que la tierra mojada me huele a ti, pero también la seca.
La seca me recuerda a las distancias impuestas creando lazos que fácilmente pierden su fuerza, deshaciéndose..
Abril es el mes donde más nos conocimos y donde perdimos todo lo que construimos,
sin saber donde se ha metido ese amor que desvanecimos,
que aún hoy no le encuentro explicación a por qué lo hicimos.
Aunque si lo sé, porque nunca estuve en tu lista de preferencias,
me dejaste compartir solo un mínimo de tu existencia,
hasta que poco a poco anulaste el tiempo para dedicarme.
Abril.
Tierra seca y mojada.
Amor contra lágrimas.
Tú y yo con vidas nada ya compartidas,
pero Abril me sigue recordando a ti.
Que nadie te robe el mes de abril ;)
ResponderEliminarNoelia, me encanta cómo escribes, y por eso creo que, aunque no sé si lo conoces, te mereces este Premio Liebster.
ResponderEliminarPásate cuando puedas por esta entrada:
http://elerrantetrovador.blogspot.com.es/2013/04/premio-liebster.html
¡Un saludo!