lunes, 29 de octubre de 2012

Nacimiento

Rompe aguas este suceso al acumular tantos excesos a lo largo del tiempo. Rompe aguas tu mar de indecisiones esperando que algún día se aclaren. Rompe aguas tu indiferencia en contraposición al amor rompiendo ilusiones varias. Y rompió a llover y con ello toda tu forma de ser se fue por el acantilado de tus recuerdos, dando lugar a un nuevo nacimiento. Resurgen partículas de mi yo que algún día se perdieron esperándote, dándole cabida de nuevo al amor, ya sin miedo al dolor y sin necesidad de castigarme. Déjale espacio al feto de tu corazón, que aún le quedan semanas de gestación antes de ver de nuevo el sol, que derrita tu frío corazón cuando pasen nueve meses. Cuando nazca le daré la enhorabuena por verlo por primera vez vivo, y que siento que no haya merecido la pena conmigo, por no haber hecho que el amor en tu vientre hubiese emergido.

lunes, 22 de octubre de 2012

Desaveniencias

No es momento aún de olvidar. Es momento de consolidar recuerdos y experiencias vividas, que se han mantenido reforzadas durante mucho tiempo. Ya sabéis que cuando algo se refuerza, tiende a mantenerse. Pues esa estabilidad a la que sometemos cualquier acontecimiento que nos resulta placentero, queremos repetirlo. (Puede ir desde comer chocolate a tener una pareja). Hablo de esta segunda. Cuando compartes un vínculo con alguien durante mucho tiempo, duele más desprenderte de él, cortarlo, matarlo. Es como rasgar y romper una camiseta que llevas puesta, destrozarla. Antes era útil, te servía, te ayudaba a vivir, o a hacerte la vida más llevadera. Pero llega un momento, en que cuando la estabilidad se tambalea e irrumpe tu vida más que lo que la ayuda a mantenerla, debes desecharla. Pero desechar o romper algo que te lleva haciendo feliz mucho tiempo no es fácil. Consiste en tomar decisiones y realizar acciones que hacen daño. Nada agradable. Pero piensas en las consecuencias de esa rotura de vínculos y confías en que todo irá mejor, al menos devolverá la estabilidad nuevamente a tu vida. No puedes confiar tu vida a algo que hace tambalearla a cada día. Por un día que te haga algo feliz a la semana y seis te mantenga siempre en la incertidumbre, no puede merecer la pena. Tienes que buscar tu felicidad, la felicidad y la estabilidad emocional siempre van de la mano. Alguien que no sabe lo que quiere no te puede producir estabilidad emocional. Alguien que no quiere ningún compromiso tampoco. Lo ideal es que los dos hagan un pacto o contrato emocional y que compartan los mismos fines en la relación. Pero con alquien que nunca sabe que quiere no puedes establecer nada. Dejando el corazón a la deriva, sin timón, sin capitán, sin barco.

sábado, 20 de octubre de 2012

La vida en un cine

(Foto mía) A finales de Septienbre, en un curso de tres días relacionado con psicólogos de emergencia en la Universidad de Sevilla, vino un hombre a darnos una conferencia llamado Ramón Bayés. Se caracterizaba por una voz con un timbre y una dulzura inolvidables. Comenzó a hablar, él debía de hacerlo sobre la última etapa de la vida, pero hizo una síntesis y reflexión sobre el significado de la vida. "Me encanta el cine, a mí, y a mi mujer", son palabras que no olvido por lo que dijo a continuación: " En el cine es el único sitio en el que conocemos a las personas en su totalidad", quiso decir, que normalmente, conocemos a las personas en una de sus facetas concretas, porque normalmente, o somos hijos o padres, trabajamos, estudiamos. Y cuando conocemos a alguien compartimos una de esas facetas, a lo mejor somos amigos pero no somos su padre ni sus hijos, por tanto, es difícil conocer a la persona en su totalidad. Y el cine, si tiene esta capacidad de representar al ser humano en todas sus facetas, en todos sus estados de ánimo, en toda su rutina diaria. Y es interesante, todo lo que difiere el ser humano de ser amigo a ser novio, de ser hijo a ser padre, de amar y de romper el corazón. Somos tan diferentes y a la vez tan parecidos. Pero todos somos humanos, y todos tenemos diferentes roles que cumplir a lo largo de la vida, que de alguna forma nos puede hacer más o menos felices.

lunes, 8 de octubre de 2012

amor de pegatina

Nadie entiende el amor. Los hombres pueden hacer generalizaciones banas y absurdas sobre las mujeres y viceversa. Pero no es más q el resumen de lo poco que hemos conocido al sexo opuesto, o lo que queremos creer de ellos. A pesar de haber tenido malas experiencias, y de hablar muy mal del género masculino. Creo que se merecen una oportunidad. Creo que en realidad si hay hombres que pueden querer de verdad a alguien con quien sean sinceros, tengan comunicación y confianza. De verdad, estoy segura de que tiene que existir en algún lado, al igual que mujeres. No somos malos ni buenos, simplemente quizás no encontraste a la persona adecuada que sea capaz de hacerte feliz, y algo no encajaba en esa relación que formásteis, eso no es culpa de nadie, simplemente algo falla en vuestras formas de ser que no se complementan. Cuando alguien da más por otras personas que por ti, cuando notes que la comunicación se está perdiendo o la confianza es nula, entonces deberías replantearte el sentido de ese lazo afectivo. Una pareja no soluciona los problemas de la vida de nadie, ni tu soledad, ni te hace mejor persona, ni te hace ser más feliz. Una persona para estar con alguien tiene q dejar espacio al compromiso, a la otra persona, al amor, pero no como alguien que rellene sus espacios vacíos, sino alguien q camine a su lado, d forma independiente, compartiendo momentos y vivencias, y dándose el apoyo necesario y el amor y sexo q también son imprescindibles en cualquier relación.